Si te pregunta qué es la electroterapia, pues es una de las técnicas para tratar lesiones en el cuerpo más utilizadas. La misma puede ser usada para varias afecciones ya sean para dolores musculares, inflamaciones en estos o para rehabilitarlos por atrofias. Esta suele implementarse periódicamente, dependiendo de la enfermedad que tenga y otras condiciones que presente.
Beneficios de la electroterapia
La electroterapia tiene bastantes beneficios para los pacientes y suele usarse de distintas maneras. La primera aplicación de la misma es como anestesia, reduciendo los dolores de los músculos, mientras la causa del mismo se corrige. Esta se suele emplear colocando electrodos alrededor de las zonas afectadas. Esto para que los nervios no puedan llevar las sensaciones del dolor al cerebro y no pueda procesarlo.
En este caso se debe hacer diariamente, para que los efectos sean constantes y puedas tener una calidad de vida óptima, mientras se cura la lesión. Dependiendo de la misma, se pueden dar incluso entre 2 a 3 sesiones diarias, si la afección que presentas es demasiado fuerte e intensa.
Otro beneficio es en el área antiinflamatoria, ya que estimula la circulación correcta de la sangre, produce endorfinas que relajan el cuerpo. Además estimula la curación de los golpes y hematomas en los músculos, para que su recuperación sea más rápida. Esto sin tener que tomar ningún antiinflamatorio ni medicamento.
Este tipo de terapia se puede realizar periódicamente, sin embargo, es recomendable consultar con el fisioterapeuta la frecuencia de la misma. Además consúltale la forma adecuada de realizarla o mejor aún que sea esta quién lo realice, para verificar que los resultados se están logrando.
Para finalizar tenemos el beneficio para la rehabilitación muscular. Las cargas eléctricas estimulan el músculo, ocasionando que se compriman y flexionen, como si hicieras ejercicios. Esto fortalece la misma, ideal para personas que se recuperan de una lesión como fracturas o desgarros musculares.
Esta terapia también ayuda a reducir los calambres y los hormigueos que se sienten en varias zonas del cuerpo. Esta terapia no sustituye los ejercicios, sino que lo complementan. Si tu fisioterapeuta te organizó una actividad física, es recomendable hacerla, pero puedes complementar la misma con esta terapia. Puedes consultarle cuantas sesiones te recomiendas, para evitar lesiones por sobrecarga física.
Ventajas de la electroterapia
Si aparte de qué es la electroterapia, te preguntas qué ventajas tiene para tí, te comentamos algunas de estas. Primeramente puedes obtener beneficios aprovechando las funcionalidades físicas del cuerpo. Es decir, los estímulos eléctricos usan cualidades del cuerpo para aplicar la terapia.
Esto implica que no tienes que consumir medicamentos, llenos de químicos que puedan alterar tu salud. Tampoco tendrás que consumir drogas analgésicas, sino simplemente ir al fisiatra a que te haga la terapia.
Lo segundo es que es una terapia que puede ser aplicada a personas de cualquier edad. Esta nos distingue la edad de los mismos, los únicos que no son aptos para las mismas son personas con marcapasos o problemas cardiacos. Es decir, que casi todas las personas pueden aplicarse esta terapia.
Otras aplicaciones de la electroterapia
Las aplicaciones de la electroterapia son diversas, comenzando con los deportistas que deben de usarla frecuentemente. Esto para tratar golpes, también para relajar los músculos, luego de algún partido o encuentro. También para rehabilitarse luego de una lesión, para volver al campo de juego, lo más pronto posible.
Las personas que trabajan en oficinas también es recomendable que la realicen periódicamente. Esto debido a que estimula la circulación de la sangre, principal afección de las personas que pasan mucho tiempo sentadas. Con esto pueden evitar problemas como várices, calambres y hormigueos en las piernas.
Para las personas de la tercera edad también es recomendable, tanto para su rehabilitación, como para problemas de circulación e incluso dolores musculares. Esta terapia le ayudara a desarrollar masa muscular, evitando la pérdida de la misma, mejorará su circulación y no le exigirá movimientos fuertes ni bruscos.
Recomendaciones
La primera y principal, consulta a un fisioterapeuta para que te examine primero, antes de someterte a la misma. Esto debido a que pueden ver otras terapias alternativas, más efectivas para su padecimiento. En segundo lugar, para conocer la causa del mismo y conocer y saber como se puede proceder.
En esto último es recomendable consultar cuantas sesiones máximas puedes hacer en el día. A pesar de que no tiene efectos secundarios, todo en exceso es malo y puede provocar molestias en el músculo o sobrecargarlo.
Otro consejo que te damos es que nunca faltes a una sesión de terapia, ya sea que tengas el aparato para hacerlo o vayas con el fisioterapeuta, ya que esto te puede retrasar e incluso puedes perder los efectos previos de las sesiones realizadas. Por ello la constancia es la clave para el éxito de la misma y se puedan ver los resultados que deseas.
Para finalizar te recomendamos siempre hacer una evaluación de avance semanal o quincenal con tu fisiatra. Así podrás determinar qué tanto has avanzado. Esto sobre todo en rehabilitación de músculos que sufrieron atrofias por falta de uso por una fractura o lesión de gravedad.
Zonas que pueden tratarse con electroterapia
Existen varias zonas que se pueden tratar con electroterapia. Las principales son los miembros del cuerpo, tanto brazos y piernas, los cuales suelen sufrir los golpes en deportes, como el fútbol o básquet. Estas suelen usarse electrodos conectadas a una máquina o unas bandas con electrodos en su superficie para enviar los impulsos eléctricos
Otras zonas del cuerpo que se suelen tratar son la espalda y los pectorales. Sobre todo para tratar lesiones, como esguinces, golpes o descolocación de los músculos de esas zonas. Así pueden aligerar las molestias y poder seguir haciendo la actividad que realiza, ya sea deportes, construcción o cualquier otra actividad laboral.
Comentarios Finales
Esta terapia es ampliamente usada en fisioterapia y es una de las más flexibles de todas. Esto debido a que la intensidad de los impulsos se pueden controlar a voluntad, así como la posición de los electrodos. También por la amplitud de la aplicación de la misma y los pocos o nulos efectos secundarios de la electroterapia.